Una selección de la mejor fotografía de prensa del año 2011 presentada en el prestigioso concurso internacional World Press Photo, con un recorrido por los acontecimientos más destacados del año.Impresionantes fotografías galardonadas según una categoría temática, como personajes, noticias, arte y entretenimiento, retratos, deportes y naturaleza, entre otros.En el 55. concurso anual se presentaron 5.247 fotógrafos de 124 países, con un total de 101.254 fotografías enviadas. 57 fotógrafos de 24 nacionalidades diferentes resultaron premiados. En este libro se presentan las 161 imágenes seleccionadas.Cada año, World Press Photo invita a los fotógrafos de prensa del mundo a participar en el concurso World Press Photo, el certamen anual más importante y prestigioso del fotoperiodismo mundial. Todas las fotografías fueron juzgadas en febrero de 2012 en Ámsterdam por un jurado internacional independiente compuesto por 19 reconocidos profesionales. En la portada del libro aparece la fotografía ganadora del World Press Photo 2011, una imagen del español Samuel Aranda para The New York Times. Fatima al-Qaws acuna a su hijo Zayed (18) quien sufre los efectos del gas lacrimógeno tras participar en una manifestación callejera en Sanaa, Yemen, el 15 de octubre. Ese día se produjeron numerosas protestas en contra del régimen autoritario del presidente Ali Abdullah Saleh, que duraba 33 años. Miles de personas se manifestaron a lo largo de Zubairy Street, una vía pública principal de la ciudad, contra las que se abrió fuego cuando alcanzaron un puesto de control gubernamental cerca del Ministerio de Asuntos Exteriores. Algunos manifestantes abandonaron la protesta, otros continuaron con ella, y volvieron a recibir el impacto de los disparos. Al menos 12 personas murieron y unas treinta resultaron heridas. Fatima al-Qaws, relacionada también con el movimiento de resistencia al régimen, encontró a su hijo en la segunda visita que realizó a los heridos que se hallaban en una mezquita que se utilizaba como hospital temporal buscando a su hijo. Zayed estuvo en estado de coma durante dos días tras el incidente. El desamparo del hijo y el dolor de la madre recuerdan composiciones artísticas como la Pietà. La escena resume lo ocurrido durante la Primavera árabe no sólo en Yemen, sino también en Túnez, Libia, Egipto y Siria.