Michele y Federico han sido amigos desde la infancia. Han compartido casa, juergas, pizzas, cerveza, alegrías y tristezas. Un día, Federico, cansado de la vida monótona de provincias, emprende un largo viaje en busca de nuevos horizontes del que regresa renovado, diferente. Está sereno y se le adivina enamorado de una chica, Sophie, y de la vida. Al poco, parte de nuevo para no volver jamás... Es entonces cuando Michele decide seguir su ejemplo. Dejando de lado sus miedos y cambiando por completo de perspectiva, se lanzará a la búsqueda de su propia felicidad, del lugar que le corresponde en un mundo tan vasto como sorprendente. Una novela reflexiva, inteligente, profunda y fresca sobre sentimientos y situaciones que a todos nos han conmovido alguna vez. «Volo escribe tal y como habla.» Il Corriere de la Sera