"Estaba decidido a hacerle pagar por lo que él creía que le había robado Erin Turner y Cristophe Donakis incendiaban las sábanas cada vez que estaban juntos, pero Erin vio cómo sus esperanzas de casarse con él se iban al traste cuando Cristophe la abandonó sin ceremonias y la puso de patitas en la fría calle de Londres. Años después, el mundo de Erin se volvió a poner patas arriba cuando conoció a su último cliente. Le bastó con percibir su olor para saber que era él ..."--Publisher.