Un espectacular descubrimiento en una iglesia romana pone a Júpiter un detective especializado de obras de arte sobre la pista de Piranesi: un artista que en el siglo XVIII sorprendió al mundo con sus misteriosos grabados de Las cárceles, unas gigantescas mazmorras tan grandes como una ciudad. Júpiter y la joven restauradora Coralina se sumergen con entusiasmo en sus investigaciones, pero no tardan en darse cuenta de que pisan terreno peligroso. Asesinatos misteriosos, un monje loco y una serie de apariciones inquietantes terminan llevándoles hasta un subterráneo donde nadie había penetrado desde hacía miles de años, cuando el espacio del Vaticano estaba ocupado por una gran necrópolis etrusca. Sin embargo, no son los únicos que conocen esta entrada al inframundo, y una organización secreta del propio Vaticano sigue sus pasos. Todos ellos parecen hacerse la misma pregunta: ¿qué era la Casa de Dédalo? ¿Acaso sus muros, como creen en el Vaticano, albergan realmente el mismísimo infierno?