Mes de octubre de 1643. Se está negociando el final de la Guerra de los Treinta Años en un momento en que la Corona francesa pasa por uno de sus momentos más delicados. Alguien ha interceptado la correspondencia cifrada expedida a los embajadores y la información ha llegado a manos de la Corona española. El cardenal Mazarino encarga al antiguo notario Louis Fronsac que investigue si hay un traidor y cómo se ha podido filtrar la información criptada. En los ambientes turbios de los servicios secretos, Louis Fronsac se encontrará con serios problemas a la hora de dilucidar quién es leal a la Corona y quién un enemigo. De sus pesquisas dependerá la estabilidad del país y el futuro de la paz en Europa. Como en su anterior novela, El misterio de la cámara azul, Jean dŽAillon recurre de nuevo al notario Louis Fronsac para sumergirnos en las conspiraciones de la corte francesa en la época de Louis XIII y la española Ana de Austria, de los cardenales Richelieu y Mazarino, de aristócratas desleales y viejos mosqueteros. Magníficamente documentada, La conjetura de Fermat es una novela policíaca con trasfondo histórico en la que, gracias a la agilidad narrativa de Jean dŽAillon, se imbrican a la perfección los hechos del pasado con la ficción, los personajes reales con una variopinta galería de caracteres brillantemente perfilados. Una novela de intriga y acción, tan misteriosa como el teorema de Fermat que le da nombre y salpicada de guiños literarios dumasianos, que recrea y nos envuelve en la cotidianidad de la época. Que nos permite, en suma, imaginar lo dura que era la vida de entonces y lo fácil que resultaba perderla.