Javier Urra, que ha sido el primer Defensor del menor de España, se propone aquí ofrecer un libro eminentemente práctico para explicar a padres y educadores qué medidas se pueden tomar antes de que sea demasiado tarde. Después de El pequeño dictador, donde se centraba fundamentalmente en evitar que los hijos se conviertan en pequeños matones, ahora quiere prestar atención a lo que una buena educación puede hacer para evitar males mayores después al tener que enfrentarse a la vida. Irá explicando, con ejemplos y de forma muy accesible, cómo hay que educar a un hijo para evitar que tenga patologías de tipo psicosomático como son: el insomnio, la jaqueca, la hipertensión, los problemas gastrointestinales, etcétera. También explicará cuáles son las vacunas contra la adicción y no sólo a las drogas y el alcohol, que son las más obvias sino al juego, al trabajo, al sexo... Y por último ofrecerá consejos educativos para evitar males típicos de esta sociedad moderna como pueden ser el estrés y el deseo de alcanzar la eterna juventud.