Stuart Connolly, un ingeniero australiano escéptico y racionalista, llega a las Tierras Altas de Escocia para construir una presa. Los viejos señores de Gairloch, recluidos en el torreón de Armandale, no ocultan su recelo ante cualquiera que pretenda alterar «la sagrada obra de Dios». Quienes realmente mandan allí son las mujeres: la centenaria baronesa lady Agatha de Montrose, su bella y temperamental nieta Valeria de quien se dice que asesinó a su marido o la tenebrosa Anna Livia, y el propio Connolly pronto caerá en las redes de las que los lugareños llaman las endemoniadas de Armandale. Cuando aparece un cadáver en las aguas del pantano, casi todos atribuyen el crimen al Vampiro de los Montrose, aunque existen evidencias de un suicidio. ¿Quién es el caballero de Montrose, enterrado en la capilla de San Mungo y que regresó de las Cruzadas con fama de haber accedido a secretos innombrables? A medida que las muertes misteriosas se suceden y el terror se adueña de la comarca, Connolly irá descubriendo una historia ancestral cuyas raíces se hunden en una oscura maldición.