Álex Prada (Sevilla, 1981). Nació en el hospital Virgen del Rocío un domingo de feria, casi llega a futbolista en el Sevilla siendo del Betis, por eso ama y odia a partes iguales eso que llaman la «sevillanía», por eso se mudó a Madrid, desde donde gana la perspectiva y la morriña necesarias. En el autobús, camino de elegir una carrera, decidió ser médico antes que escritor, luego empató la ecuación y ahora ejerce ambas profesiones de costero a costero. Sus primeras publicaciones fueron los poemarios Bipedestación (y otros conceptos antropomorfos) (Huerga y Fierro, 2013) y la Linterna de Aristóteles (Huesos de Jibia, 2014). Su primera incursión en la prosa fue con Diálogo de perros y ángeles (Huerga y Fierro, 2016), un conjunto de relatos donde se les hace justicia a personajes tan dispares como Giacometti, la Dietrich, Fray Luis de León, Manolín Bueno, Fernando de Herrera o Esquerita. Ha trabajado como redactor colaborador para revistas como Panenka, T Magazine de New York Times Spain o Telegráfica. Está en racha y tiene entre manos proyectos inminentes que darán mucho que hablar.
