España, finales del siglo XVII. En la corte, la mala salud de Carlos II presagia su próxima muerte. La sucesión del rey hechizado que carece de descendencia inquieta a los soberanos europeos y los prohombres del país. La reina María Ana de Neoburgo, el inquisidor general, los ministros, cortesanos y clérigos cercanos a la corte se convierten en testigos de una fascinante intriga política y eclesiástica dominada por la crueldad y la ambición. Una sola puerta la podrá deshacer: hallar en Praga a un alquimista que destruya el hechizo que padece el rey. El marqués de Mancera es enviado a la ciudad mágica, donde el alquimista acepta el encargo siempre y cuando Mancera le proporcione una copia del libro de Abraham el Judío, una obra fundamental para la obtención del oro alquímico.