Antón Mallick, un joven agente de seguros, está de baja laboral y emocionalmente hundido. Cuando una misteriosa mujer le dice que va a tener un hijo suyo sufre un ataque de pánico que le impide reconocerla. Pero Antón no quiere ser una víctima. No quiere ser el clásico llorón contemporáneo. Ese mismo día inicia un diario dirigido a un antepasado suyo, húngaro y optimista, autor de unas memorias. El objetivo: salir del pozo. Ser feliz. Para lograrlo, leerá libros de autoayuda y ensayos de filósofos y escritores, desde Epicuro a Montaigne o Pessoa. Regresará al trabajo. Volverá a viajar. Y buscará a esa mujer. Sus amigos, sus fantasmas y su peculiar familia le acompañaran durante sus peripecias, en una carrera contrarreloj en busca de un ideal escurridizo: la felicidad. Con una estructura fragmentaria y moderna, una mirada incisiva y mucho humor, Casariego nos invita a conocer íntimamente a alguien que desea lo mismo que los demás, pero que al menos se atreve a perseguirlo.