Mientras la anarquía asola el país a cause del largo enfrentamiento entre el rey Estaban y la emperatriz Maud, la legítima heredera al trono, Simon, un chico de catorce años que sufre ataques de epilepsia, lo envían a la terrible isla de Whitholm, acusado de estar poseído por el diablo. Allí Simon conoce a otros desterrados, personas minusválidos o enfermas, todos excluidos de la sociedad igual que él. Cuando, por un capricho de la naturaleza, puenden escapar de la isla, regresan a tierra firme. Vuelvan a un país abatido por la guerra civil y el hambre. Y serán protagonistas de situaciones determinantes para el futuro de su país.