Lucía Serrano nació en 1983 en Madrid. Desde pequeñita, decidió que cuando creciese sería «cuentista», pero de las que cuentan tanto con las palabras como con la imagen. Así que, cuando cumplió los dieciocho años, se puso a estudiar Bellas Artes, y, cuando acabó la carrera, se trasladó a Barcelona, donde sigue viviendo hoy en día. En este tiempo ha aprendido de grandes maestros de la ilustración, ha podido publicar muchos cuentos, y ha recibido varios premios: Premio Fundación Cuatrogatos en 2016, por El baño de Carlota ; Premio Junceda en 2012, por En blanco ; XIII Premio A la Orilla del Viento en 2009, del Fondo de Cultura Económica, por ¡Qué niño más lento! y el Premio Princesa de Éboli en 2008, convocado por Anaya, por El día que olvidé cerrar el grifo .